Los regidores de Morena en el Ayuntamiento leonés se negaron a renunciar a sus asesores y asistentes, minutos después de exigir que el gobierno municipal se “apretara el cinturón” e implementará un intenso programa de austeridad en vez de contratar deuda pública.

La discusión surgió a partir del reconocimiento hecho por parte de la síndica, Leticia Villegas Nava, a los diputados locales, quienes aprobaron este jueves la solicitud de crédito remitida por el cuerpo edilicio para la generación de acciones de infraestructura en León.

Fue el regidor de Morena, Oscar Antonio Cabrera Morón, quien criticó las palabras de la síndica explicando que las obras valen la pena, pero que éstas deben ser financiadas “apretándonos el cinturón, principalmente en la administración pública”.

Bajo este argumento, el síndico José Arturo Sánchez Castellanos, tomó la palabra y propuso que todos y cada uno de los integrantes del cabildo leonés renunciaran a sus privilegios, como el contar con asesores y asistentes, algo que –además- recordó fue una petición hecha por la misma oposición hace varios años.

“Vamos a perder privilegios, vamos a renunciar a nuestros asesores y a nuestros asistentes todas y todos, lo invito. Vamos a perder los privilegios, a ver si usted y todos tienen la voluntad de hacerlo, y lo digo igual, porque son privilegios pues antes no existían, fue una petición de la oposición hace algunos años, así que vamos a perder privilegios, lo invito a que sea congruente”.

De inmediato, la regidora morenista Erika del Rocío Rocha Rivera, intervino para aclarar que tener asesores y asistentes no es un privilegio y consideró: “no hay que meternos con la gente que hace la talacha”.

En contraparte, mejor pidió que los secretarios, súper secretarios y directores generales se bajen los sueldos.

A la propuesta de Rocha Rivera, el regidor Cabrera Morón agregó que se deben revisar en dónde están los privilegios en la administración municipal para saber quiénes son los “machuchones”.

“Es un falso debate que se quieran ir en contra de los compañeros (asistentes y asesores) que son los más desprotegidos”, argumentó e insistió que los préstamos ya no caben en estos tiempos y que existen otras formas de “abrazar” las necesidades ciudadanas como un intenso programa de austeridad.

Tras el rechazo de los ediles emanados de la 4T, el síndico José Arturo Sánchez Castellanos dijo que ya no se ocuparía de comentar los argumentos del regidor Cabrera porque “cuando son sus intereses, ahí sí ya no le gusta y propone ocurrencias”.

Sin embargo, aprovechó para aclarar a la regidora Erika Rocha por qué sí se tienen que eliminar esos privilegios.

“Yo no sé por qué usted no pensó en lo mismo cuando pidió licencia por una cuestión política, por una sesión, porque usted iba a tomar protesta o tomó protesta en un puesto directivo de su partido (…) una sesión se fue y regresó, pero sus asesores, ¿qué pasó con sus asesores? ¿Cuánto nos costó esa decisión al municipio? Se la digo, 80 mil pesos de liquidación a su asesor y 52 mil pesos de liquidación a su asistente por una decisión política nomás por irse y regresar.

“Una decisión política que tuvimos que pagar todos los leoneses, por algo que no debió haberse ejecutado, por eso hay que quitarnos esos privilegios todos”.

La regidora aclaró que no fue una sesión, sino tres y que no se pagó nada extra sino que todo se hizo dentro del marco de la ley.

Nuevamente, Sánchez Castellanos replicó que por esa decisión política y personal que tuvo efecto solamente por un mes y medio se pagaron tres meses de indemnización equivalentes a 130 mil pesos simplemente porque se les tenía que despedir.

“Para que vean cómo se tergiversan las realidades. Pagamos tres meses de liquidación y supongo que ustedes ya tienen nuevos asesores y asistentes, fíjense, por un mes y medio, 130 mil pesos nos costó a los leoneses algo que no debió haberse erogado, esos son los privilegios que pido que nos quitemos y todavía ustedes se atreven a decir que no lo son”, concluyó.