Las reliquias de San Sebastián, Patrono de León, solo expuestas cada 20 de enero

Antes de la Santísima Virgen de la Luz, León tuvo un santo patrono: San Sebastián, de quien todavía podemos disfrutar de una de sus reliquias, sin embargo, solo las presentan al público cada año, los días 20 de enero, aniversario de la ciudad.

La reliquia que es un «huesito» del santo, está resguardada en el templo Del Sagrario, el primero de la ciudad, ubicado en la Plaza Principal del Centro Histórico de la ciudad.

Como ya es tradición, la misa por la fundación de León será a las 12:00 del mediodía en el misma misma parroquia y será al terminar, cuando solo por un rato, los feligreses podrán ver el pedacito que aún conservamos de nuestro patrono.

Un poco de historia

Fue un 30 de enero de 1918 cuando la reliquia llegó a León y el 5 de febrero de ese mismo año se celebró una misa especial en su honor por gestiones del párroco Espiridión Gaona.

Sin embargo, tiempo antes, en 1772, San Sebastián fue nombrado patrono de la Villa de León.

La Parroquia Del Sagrario de la Diócesis o Parroquia de San Sebastián, como se le conoce normalmente, fue el primer templo construido en la ciudad de León a finales del siglo XVI, es por tal importancia que ahí se resguarda la reliquia.

El 7 de mayo de 1956 el Obispo Martín del Campo consagró parroquia a dicho templo. No se tiene una fecha exacta de la fundación de este recinto.

En el año de 1628 dejó de oficiarse misa debido a que se cayó la cubierta de la iglesia y los vecinos pidieron ayuda a Lope de Velasco para poder tapar el techo antes de la temporada de lluvias.

Lope de Velasco trajo a Pedro de Saldaña y Fulano de Garibaldos, quienes eran maestros de carpintería, para reparar los daños de la iglesia.

En 1629 comenzó a construirse el retablo del altar y la decoración del mismo. En 1835 se colocó una pila bautismal de doble extensión dentro del recinto. En 1854 el templo se convirtió en Sagrario de la Nueva Diócesis de León.